¿Sabías que existen criaturas microscópicas capaces de devorar tu cerebro? Aunque suene a una película de ciencia ficción, la Naegleria Fowleri, una ameba unicelular, es capaz de causar una infección cerebral extremadamente rara, pero mortal. Se conoce como la ameba comecerebros, y a pesar de ser una amenaza microscópica, ha despertado la curiosidad y el miedo de la comunidad científica y el público en general.

La Naegleria Fowleri

La Naegleria Fowleri, más conocida como ameba comecerebros, se encuentra comúnmente en aguas cálidas y estancadas, como lagos, ríos y piscinas no tratadas.

Una vez que la persona entra a estas aguas, y este parásito logra entrar en contacto con el cuerpo a través de la nariz, esta ameba puede migrar hacia el cerebro, donde comienza a destruir el tejido cerebral.

¿Cómo este parásito puede infectar el organismo?

Como se mencionó anteriormente, esta ameba comecerebros suele estar presente en aguas con condiciones específicas, y la infección puede ocurrir en alguno de estos lugares:

  • Aguas dulces y cálidas. De acuerdo con los especialistas, las infecciones ocurren después de nadar o bucear en lagos, ríos, estanques o aguas termales.
  • Durante los meses cálidos. También señalan que las infecciones son más comunes durante los meses de verano, época en la cual las temperaturas del agua son más altas.

Una vez que ocurre el contacto con el agua infectada, el proceso de infección cumple estas etapas:

  • Penetración nasal. Este parásito ingresa al cuerpo a través de la nariz, generalmente durante actividades acuáticas como nadar o bucear.
  • Viaje al cerebro. Desde la nariz, la ameba migra hacia el cerebro, donde se multiplica con gran rapidez.
  • Destrucción del tejido cerebral. Una vez que el parásito está alojado en el cerebro y en proceso de reproducción, comienza a alimentarse del tejido cerebral, causando una inflamación severa y la muerte de las células cerebrales.

Síntomas y diagnóstico

Los síntomas de la infección por Naegleria Fowleri suelen aparecer rápidamente y empeoran progresivamente. Algunos de los síntomas más comunes incluyen:

  • Cambios en el olfato o gusto. Este es uno de los primeros síntomas que presenta la persona infectada, consiste en una pérdida o alteración del sentido del olfato o del gusto.
  • Dolor de cabeza. Un dolor de cabeza intenso y persistente, es común.
  • Rigidez en el cuello. La rigidez en el cuello, es otro síntoma característico.
  • Náuseas y vómitos. Estos síntomas también pueden presentarse.
  • Confusión. A medida que la infección progresa, puede causar confusión y otros cambios en el estado mental, debido al daño en los tejidos del cerebro.
  • Otros síntomas. Otros síntomas frecuentes son la fiebre alta y convulsiones.

Vale destacar, que el diagnóstico temprano de la infección por Naegleria Fowleri es muy difícil, ya que los síntomas iniciales pueden confundirse con otras enfermedades, las cuales descartan, antes de optar por el diagnóstico definitivo, que se realiza mediante un análisis del líquido cefalorraquídeo.

Tratamiento y prevención

En la actualidad, no existe un tratamiento eficaz para la infección por Naegleria Fowleri. La mayoría de las personas infectadas mueren, a pesar de los esfuerzos médicos.

La mejor manera de prevenir la infección por Naegleria fowleri es evitar el contacto con aguas cálidas y estancadas, especialmente durante actividades acuáticas. Algunas recomendaciones incluyen:

  • Evitar nadar en aguas dulces y cálidas. Esta recomendación es muy valiosa, en especial durante los meses de verano.
  • Mantener piscinas cloradas. Es la mejor opción para mantener estas aguas estancadas en condiciones adecuadas, libres de estos parásitos.
  • Tapar la nariz al nadar. Esto puede ayudar a prevenir que el agua entre en las fosas nasales.
  • No saltar cabeza abajo en aguas poco profundas. Esto puede aumentar el riesgo de que el agua entre por la nariz.

Otros parásitos que pueden afectar al cerebro

Aunque la Naegleria Fowleri es uno de los parásitos más conocidos que afectan al cerebro, existen otros organismos que pueden causar infecciones cerebrales, que también requieren de mucha atención, como:

Toxoplasma gondii

La Toxoplasma gondii es un parásito microscópico que puede causar una infección llamada toxoplasmosis.

Aunque muchas personas infectadas no presentan síntomas, esta infección puede ser grave, ocasionando serios daños a quien se infecta, en especial a mujeres embarazadas y personas con sistemas inmunitarios debilitados.

Este parásito se transmite a través del consumo de carne cruda o poco cocida, o por el contacto con heces de gatos infectados.

Taenia solium

La Taenia solium es un tipo de parásito intestinal, comúnmente conocido como tenia del cerdo. Es un gusano plano y alargado que puede llegar a medir varios metros.

La infección por Taenia solium ocurre principalmente al consumir carne de cerdo cruda o poco cocida que contiene los quistes del parásito, llamados cisticercos. Estos quistes se desarrollan en los músculos del cerdo cuando ingiere los huevos de la tenia.

Vale mencionar, que la ingesta de estos huevos de Taenia Solium pueden desarrollar una infección conocida como Neurocisticercosis.

Estos parásitos pueden causar una variedad de síntomas neurológicos, que pueden incluir convulsiones, dolores de cabeza, problemas de visión y trastornos del movimiento.

Las infecciones parasitarias del cerebro son enfermedades graves y a menudo mortales. Aunque la Naegleria Fowleri es un caso extremo, es importante ser conscientes de los riesgos asociados con la exposición a ciertos ambientes y tomar las precauciones necesarias para proteger nuestra salud.